En el día del padre y santo de Joses/Josefas y variables, vamos a hacer una terapia en casa de reminiscencia. Para ello nos basta con un album de fotos, verlo con nuestro enfermo en tranquilidad y que nos pueda ir descubriendo la historia que hay detrás de cada fotografía. No hace falta verlo todo junto, llega con dedicarle un rato donde la persona con demencia tenga el tiempo suficiente para poder reconocer y hablar de unas cuantas fotos, sin apurarlo y dejando que busque en los recuerdos.
A veces nos viene bien buscar en nuestra memoria, con la simple ayuda de una fotografía, y notar cómo vuelven a nosotros imágenes, voces e incluso olores.
Esperamos que, a pesar de las condiciones en las que estamos, podáis disfrutar algo en este día tan entrañable y no dejéis que se escapen vuestros recuerdos, disfrutad de ellos!